El mito dice que Apolo retó a Eros en el arte de lanzar flechas. Eros se tomó esto como una ofensa y decidió vengarse de Apolo. Eros tiró una flecha de oro a Apolo para que se enamorase inmediatamente, Eros también le tiro una flecha a Dafne, una Ninfa a la que la gustaba la vida en solitario, pero la flecha que le tiró no era de oro, sino de plomo, que causaba el rechazo amoroso. Cuando Apolo vio a Dafne, sintió un profundo amor por ella y salió corriendo tras ella, mientras que Dafne, salia corriendo huyendo de él. Cuando Dafne estaba agotada de correr y no podía más, le pidió a su padre que la ayudase, y éste decidió convertirla en un laurel, y cuando Apolo llegó hasta ella y la atrapó, para entonces ya estaba convirtiéndose en laurel. Pero Apolo no renunció a su amor y cuido el árbol.

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